Antes solo eran las máscaras y las murgas. Ha resurgido con fuerza desde el año 1985. El domingo de Carnaval o el de Piñata salen las murgas cantando sus canciones, recorriendo las calles, los bares o en las puertas de algunas casas. Las canciones son críticas con un toque de humor de algún hecho ocurrido en el pueblo bien sea de personas, familias, hechos políticos o en general de la sociedad. El miércoles de Ceniza, un grupo de jóvenes recorren las calles, vestidos de luto, llorando el Entierro de la Sardina. El sábado de carnaval por la tarde salen las máscaras y disfraces en el pasacalle y por la noche se celebra un baile de disfraces y dan los premios a los mejores disfraces en las discotecas y en los pubs.