En 1812 la villa ha superado a sus anejos y aparece ya como cabecera de feligresía.

Durante esta época se produce el desarrollo administrativo autónomo de la villa de Los Blázquez.
En 1817, siendo aldea de Fuente Obejuna, pasa a formar parte de las Cinco Aldeas (Valsequillo, Esparragosa, La Granjuela, Los Prados y Los Blázquez), unión que perdura hasta 1842 en que Los Blázquez, al igual que Valsequillo y La Granjuela, adquieren títulos de villas.
Sobre el resto de la contemporaneidad la influencia de Fuente Obejuna se manifiesta evidentemente. Durante la Restauración son perfectamente detestables numerosos episodios de caciquismo.
En los días de la II República, y en las tres confrontaciones generales, el comportamiento político de la villa tiene un claro matiz progresista, con un claro predominio del PSOE.

Al estallar la Guerra Civil, como casi toda la comarca, quedó fiel al gobierno de la República.